Christopher Navarro Trujillo nació en Santa Cruz de Tenerife en 1991. Pasado un año su familia decidió ir a vivir a Arure, en La Gomera. A pesar de sus 25 años, Christopher cuenta con una vida laboral muy variada. No terminó bachillerato y, por ello, hizo la prueba de acceso a un ciclo superior que le dio la oportunidad de comenzar sus estudios de Agencias de Viajes e Información Turística, donde estuvo seis meses. Inició su vida laboral en el Ayuntamiento de Valle Gran Rey con el programa de Empleo Joven, continuó trabajando en el Cabildo de La Gomera y en Gesplan durante las campañas contra-incendios. Asimismo, antes de comenzar a trabajar en el sector turístico, trabajó como taxista en el sur de Tenerife.
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Siempre se ha dicho que la hostelería y el turismo son los sectores que conllevan un gran sacrificio para quien haya elegido de forma libre este trabajo como su profesión, o que por circunstancias de la vida haya tenido que optar a él por necesidad. Yo fui muy afortunada, y tuve muy claro desde muy temprana edad que quería dedicarme al turismo. Fue durante unas vacaciones estivales con la familia cuando descubrí lo fascinante que era el ser animadora y recepcionista de hotel. Yo era una niña que con tan sólo siete años llevaba mi diccionario de inglés a cuestas para poder comunicarme con otros niños extranjeros.
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